Cuando pensamos en los autos súper deportivos, esos que tienen tantos caballos como ceros en el precio, nos remitimos a Italia, Inglaterra y en ocasiones a Estados Unidos, pero cuando hablamos del Amoritz GT DR7 y su origen brasileño cuesta trabajo creerlo, aunque sin dudas es atractivo e imponente.
Aunque de momento sólo es un auto en pleno desarrollo y las imágenes han sido generadas por computadora, podemos ver claramente la idea que tiene Guillermo Denis Rosset en conjunto con el diseñador también brasileño Fernando Morita, un súper deportivo en toda la extensión de la palabra con una edición de 50 unidades a un precio de un millón de dólares.
La idea del Amoritz no es nueva y lleva gestándose desde el 2008, y ahora cuanta ya con imagen, en la que destaca el trabajo aerodinámico, el auto tiene cierto aire de MclarenF1 e incluso el interior tiene la configuración para tres personas (el piloto y los dos traseros.
Al frente podemos ver un extraño alerón tipo auto fórmula integrado al diseño del cofre, mientras que la parte de abajo deja ver un conjunto oscuro que alberga las luces que nos recuerdan al Ferrari Scuderia, la parte baja de la fascia cuenta con pequeños deflectores al puro estilo del DTM.
La parte lateral pareciera estar construida directamente con el fluido del túnel de viento el cual en teoría brinda mayor apoyo lateral y de paso manda aire fresco a la llanta y frenos traseros. El techo panorámico va hasta la parte trasera donde se pierde bajo el alerón, mientras que la parte baja cuenta con un difusor que actúa directamente con el fondo plano del auto.
Mecánicamente hereda el motor de la pasada generación del Dodge Viper , el V10 de 8.4 litros pero, para ésta ocasión agrega un par de turbos para llevarle hasta los 1.020 hp, ¿nada mal, verdad?
El Amoritz lleva la aerodinámica del auto a un grado superlativo, recordemos que anteriormente los autos tenían que recurrir a alerones gigantes para no despegar (literalmente), hasta que llegó el Lamborghini Countach, el cual la propia carrocería eran los alerones de apoyo, ahora tenemos autos con alerones 'inteligentes' en diferentes partes de la carrocería que hacen relativamente sencillo manejar autos con tantos cientos de caballos.
Aunque de momento sólo es un auto en pleno desarrollo y las imágenes han sido generadas por computadora, podemos ver claramente la idea que tiene Guillermo Denis Rosset en conjunto con el diseñador también brasileño Fernando Morita, un súper deportivo en toda la extensión de la palabra con una edición de 50 unidades a un precio de un millón de dólares.
La idea del Amoritz no es nueva y lleva gestándose desde el 2008, y ahora cuanta ya con imagen, en la que destaca el trabajo aerodinámico, el auto tiene cierto aire de MclarenF1 e incluso el interior tiene la configuración para tres personas (el piloto y los dos traseros.
Al frente podemos ver un extraño alerón tipo auto fórmula integrado al diseño del cofre, mientras que la parte de abajo deja ver un conjunto oscuro que alberga las luces que nos recuerdan al Ferrari Scuderia, la parte baja de la fascia cuenta con pequeños deflectores al puro estilo del DTM.
La parte lateral pareciera estar construida directamente con el fluido del túnel de viento el cual en teoría brinda mayor apoyo lateral y de paso manda aire fresco a la llanta y frenos traseros. El techo panorámico va hasta la parte trasera donde se pierde bajo el alerón, mientras que la parte baja cuenta con un difusor que actúa directamente con el fondo plano del auto.
Mecánicamente hereda el motor de la pasada generación del Dodge Viper , el V10 de 8.4 litros pero, para ésta ocasión agrega un par de turbos para llevarle hasta los 1.020 hp, ¿nada mal, verdad?
El Amoritz lleva la aerodinámica del auto a un grado superlativo, recordemos que anteriormente los autos tenían que recurrir a alerones gigantes para no despegar (literalmente), hasta que llegó el Lamborghini Countach, el cual la propia carrocería eran los alerones de apoyo, ahora tenemos autos con alerones 'inteligentes' en diferentes partes de la carrocería que hacen relativamente sencillo manejar autos con tantos cientos de caballos.
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