Chrysler se encuentra en una nueva época de renacimiento, y uno de sus modelos que le han ayudado en esta etapa es el 200, un sedán familiar mediano con muchas buenas cualidades.
Desde el año pasado que hizo su arribo, este sedán ha sido parte de la reestructuración estética de la casa americana. Fue uno de los primero autos en portar el nuevo logotipo y presentarnos la nueva parrilla que caracteriza ahora a la marca.
El estilo exterior es moderno y los faros alargados le dan un toque deportivo que es acentuado por la línea de la cintura alta y los postes A y C angulados. El diseño de los rines también enfatiza este carácter. La idea general del auto es ofrecer algo diferente en un segmento que, según Chrysler, está “lleno de lo mismo”.
En el interior el espacio es bastante bueno tanto adelanto como atrás. La posición de manejo es cómoda y la mayoría de los controles están a la mano. Las plazas traseras tienen buen espacio y cuatro adultos pueden viajar cómodamente en este auto. El espacio de carga también es muy bueno gracias a que la cajuela tiene buen acceso y profundidad.
El equipamiento con el que cuenta el 200 S es de primer nivel. Cuenta con asientos de piel de ajuste eléctrico, así como vidrios, espejos y seguros eléctricos. También tiene navegador y muy buen sistema de entretenimiento el cual se controla desde la pantalla táctil que encontramos en el centro del tablero.
El motor que utiliza la versión S, que fue nuestro modelo de pruebas, es el nuevo motor Pentastar V6 de 3.6 litros con 283 caballos de fuerza, acoplado a una caja automática de 6 velocidades con opción para cambios manuales por medio del sistema AutoStick de Chrysler.
La respuesta del motor es lineal y constante y otorga gran parte de la potencia desde la parte baja del tacómetro. Definitivamente este nuevo motor Pentastar del grupo Chrylser es un muy buen producto. Sus más de 280 caballos de fuerza mueven al 200 con gran soltura y lo convierten en un auto rápido, sobre todo en cuanto a aceleración.
Los ingenieros de Chrysler se preocuparon por crear un auto más deportivo y cómodo que su antecesor, el Sebring. Para el 200 se puso mucho énfasis en la suspensión, no sólo para entregar un manejo más deportivo, también para hacer lo más seguro. La insonorización de la cabina también es un punto en el que se concentraron bastante, obteniendo una de las mejores de su segmento.
Como la gran mayoría de los sedanes medianos familiares, el 200 S presenta un poco de subviraje al tomar las curvas a altas velocidades. Una de las grandes diferencias que notamos con respecto del Sebring es que la rigidez torsional del 200 es mucho mejor, lo que nos permite tener más control sobre el auto en las curvas. Aunque la dirección se siente un poco anestesiada, el auto apunta bien en las curvas y no es difícil trazarlas con el radio de giro correcto.
El Chrysler 200 es una parte muy importante en el resurgimiento de la marca americana, este auto fue creado pensando en ofrecer lo mejor que pueden ofrecerle a una familia promedio a un precio accesible, esperando en que se convierta en su auto más vendido, por lo menos en el mercado americano.
El esfuerzo y la dedicación que pusieron en este auto se nota cuando uno se sienta detrás del volante y encuentra un producto mejor que el que había anteriormente, lo que nos da mucha esperanza en un futuro lleno de éxito para la Chrysler.
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