El sector crece de 20 a 40 por ciento y se espera que en 2011 se vendan en el país más de 800 mil vehículos, 100 mil más que el año pasado. El mercado no está preparado para tal demanda; de todas maneras, las concesionarias pasan por su mejor momento.
Es tal la demanda de automóviles, que este año las ventas no sólo batirán todos los récords sino que ya a esta altura superan las posibilidades del mercado de atender el actual volumen de operaciones.
Este año se venderán en el país más de 800 mil vehículos, 100 mil más que lo proyectado originalmente.
La mayoría de los concesionarios cordobeses venden entre 20 y 40 por ciento más que el año pasado, lo que no logra disimular problemas logísticos, de rentabilidad, de recursos humanos y de falta de stock.
Así lo expresan los directivos de los principales concesionarios locales, reunidos en Rocamadour por el Círculo de Anunciantes de La Voz del Interior .
Claudio Barrera, presidente de Cerro Autos; Diego Parra, vicepresidente de Parra; Edgardo Fernández Favarón, gerente comercial de Centro Motor; Alejandro Naum, presidente de A. Naum; Santiago Amoedo, gerente general de Aupesa; Eduardo Manrique, gerente general de Grupo Galia (Auto Haus); Osvaldo Vicente, gerente general de Mediterráneo Automotores; Fernando Fraresso, director ejecutivo de Mundo Maipú; Daniel Montironi, director ejecutivo de Montironi Automotores y Leandro Pagnone, gerente general de Tagle, destacaron el buen momento del sector.
“En volumen de ventas, este será el mejor año desde que tenemos concesionario”, explica Montironi.
Además, Manrique advierte que las ventas están en niveles récord, pero la rentabilidad “es muy baja”. “Lo que pasa es que aumentaron los costos laborales y es mayor la presión fiscal”, agrega Fernández Favarón.
Para Diego Parra, el crecimiento obligó a las empresas a realizar fuertes inversiones, principalmente en la ampliación del salón de venta y del área de servicios, como también en la apertura de nuevos locales, lo que elevó los costos.
Por su parte, Osvaldo Vicente aporta que este crecimiento también estuvo acompañado por una mayor competencia, que obligó a incrementar los descuentos, lo que reduce la contribución marginal de cada unidad vendida.
“Dolores del crecimiento”. Aun así, los empresarios aseguran a coro: “Preferimos estos dolores de crecimiento a los conflictos de la crisis”.
El primer problema que destapó el crecimiento récord es la debilidad de la logística.
“El país no está preparado para tantas operaciones. Antes un cliente compraba un auto y a los pocos días estaba en el salón; ahora la demora promedio de entrega es de 30 días. A esto se suma lo que tarda la documentación del vehículo, que se profundiza cuando hay problemas gremiales en el Registro del Automotor”, dice Montironi.
La demora es mayor en los autos importados. “No se puede hacer mucho cuando la fábrica no entrega. Hay modelos cuya venta directamente se suspendió, por ejemplo Vento Turbo Diésel o la Saveiro cabina extendida, donde los plazos de entrega exceden los cinco meses o la fecha es totalmente incierta”, recalca Eduardo Manrique.
Para Naum, el problema es el volumen de vehículos que absorbe Brasil. “Citroën adelanta con un mes el cupo de vehículos que entrega el mes siguiente. Muchas veces pasa que a mitad del mes cambia porque Brasil entrega la mitad”, indica.
Sucede que las automotrices del Mercosur prefieren colocar la producción fuera de Argentina. “El cliente no entiende que se demore la entrega de autos fabricados en Buenos Aires o en Córdoba. Pero buena parte se va a Brasil, porque logran precios hasta 50 por ciento mayores”, recalca Montironi.
Este crecimiento, además de desnudar carencias logísticas, obligó a una fuerte incorporación de personal, lo que mostró los problemas que tienen las empresas en el manejo de los recursos humanos.
“La concesionaria tiene más volumen; esto aumenta la exigencia y el desgaste en el personal, lo que afecta los niveles de calidad en momentos en que terminales y clientes exigen calidad”, advierte el gerente general de Aupesa.
Además de los clásicos problemas que comparten con otras empresas de conseguir el compromiso, el sector incluso tiene dificultades para cubrir algunos puestos. “Abrir una concesionaria en localidades del interior es un problema. Nadie quiere ir”, asegura el titular de Cerro Autos.
Córdoba. En enero y junio, las ventas locales fueron el 10% del país, con 42.580 unidades.
Plan de ahorro. “Córdoba es líder en planes de ahorro. En el país son el 20% de las ventas, pero en la provincia llegan al 30%”, dice Leandro Pagnone, del Grupo Tagle.
Chicos. Toyota se meterá en 2013 en el segmento chicos con el Etios, para el que pondrá un plan de ahorro.
Camionetas. A la agitación que generó en el mercado Amarok, se sumarán las nuevas Ranger y Chevrolet. Por ahora, Hilux sigue liderando.
Este año se venderán en el país más de 800 mil vehículos, 100 mil más que lo proyectado originalmente.
La mayoría de los concesionarios cordobeses venden entre 20 y 40 por ciento más que el año pasado, lo que no logra disimular problemas logísticos, de rentabilidad, de recursos humanos y de falta de stock.
Así lo expresan los directivos de los principales concesionarios locales, reunidos en Rocamadour por el Círculo de Anunciantes de La Voz del Interior .
Claudio Barrera, presidente de Cerro Autos; Diego Parra, vicepresidente de Parra; Edgardo Fernández Favarón, gerente comercial de Centro Motor; Alejandro Naum, presidente de A. Naum; Santiago Amoedo, gerente general de Aupesa; Eduardo Manrique, gerente general de Grupo Galia (Auto Haus); Osvaldo Vicente, gerente general de Mediterráneo Automotores; Fernando Fraresso, director ejecutivo de Mundo Maipú; Daniel Montironi, director ejecutivo de Montironi Automotores y Leandro Pagnone, gerente general de Tagle, destacaron el buen momento del sector.
“En volumen de ventas, este será el mejor año desde que tenemos concesionario”, explica Montironi.
Además, Manrique advierte que las ventas están en niveles récord, pero la rentabilidad “es muy baja”. “Lo que pasa es que aumentaron los costos laborales y es mayor la presión fiscal”, agrega Fernández Favarón.
Para Diego Parra, el crecimiento obligó a las empresas a realizar fuertes inversiones, principalmente en la ampliación del salón de venta y del área de servicios, como también en la apertura de nuevos locales, lo que elevó los costos.
Por su parte, Osvaldo Vicente aporta que este crecimiento también estuvo acompañado por una mayor competencia, que obligó a incrementar los descuentos, lo que reduce la contribución marginal de cada unidad vendida.
“Dolores del crecimiento”. Aun así, los empresarios aseguran a coro: “Preferimos estos dolores de crecimiento a los conflictos de la crisis”.
El primer problema que destapó el crecimiento récord es la debilidad de la logística.
“El país no está preparado para tantas operaciones. Antes un cliente compraba un auto y a los pocos días estaba en el salón; ahora la demora promedio de entrega es de 30 días. A esto se suma lo que tarda la documentación del vehículo, que se profundiza cuando hay problemas gremiales en el Registro del Automotor”, dice Montironi.
La demora es mayor en los autos importados. “No se puede hacer mucho cuando la fábrica no entrega. Hay modelos cuya venta directamente se suspendió, por ejemplo Vento Turbo Diésel o la Saveiro cabina extendida, donde los plazos de entrega exceden los cinco meses o la fecha es totalmente incierta”, recalca Eduardo Manrique.
Para Naum, el problema es el volumen de vehículos que absorbe Brasil. “Citroën adelanta con un mes el cupo de vehículos que entrega el mes siguiente. Muchas veces pasa que a mitad del mes cambia porque Brasil entrega la mitad”, indica.
Sucede que las automotrices del Mercosur prefieren colocar la producción fuera de Argentina. “El cliente no entiende que se demore la entrega de autos fabricados en Buenos Aires o en Córdoba. Pero buena parte se va a Brasil, porque logran precios hasta 50 por ciento mayores”, recalca Montironi.
Este crecimiento, además de desnudar carencias logísticas, obligó a una fuerte incorporación de personal, lo que mostró los problemas que tienen las empresas en el manejo de los recursos humanos.
“La concesionaria tiene más volumen; esto aumenta la exigencia y el desgaste en el personal, lo que afecta los niveles de calidad en momentos en que terminales y clientes exigen calidad”, advierte el gerente general de Aupesa.
Además de los clásicos problemas que comparten con otras empresas de conseguir el compromiso, el sector incluso tiene dificultades para cubrir algunos puestos. “Abrir una concesionaria en localidades del interior es un problema. Nadie quiere ir”, asegura el titular de Cerro Autos.
Claves del mercado
Córdoba. En enero y junio, las ventas locales fueron el 10% del país, con 42.580 unidades.
Plan de ahorro. “Córdoba es líder en planes de ahorro. En el país son el 20% de las ventas, pero en la provincia llegan al 30%”, dice Leandro Pagnone, del Grupo Tagle.
Chicos. Toyota se meterá en 2013 en el segmento chicos con el Etios, para el que pondrá un plan de ahorro.
Camionetas. A la agitación que generó en el mercado Amarok, se sumarán las nuevas Ranger y Chevrolet. Por ahora, Hilux sigue liderando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario