Las marcas lo hicieron en la carrera 7a. con calle 77, en el primer piso de la Torre Maserati.
El lugar, tipo plazoleta y contiguo al concesionario, funciona como café con una carta de platos italianos, desde hace poco más de un mes. Allí, junto a un par de autos de gama alta, sobresalen las mesas con parasol, donde se pueden probar los platos italianos de la carta o pasar tardes de café con una serie de platos ligeros.
Adentro, el lugar ofrece un espacio tipo lounge , en el que predominan los colores rojo, blanco y negro.
Obviamente, en materia de gastronomía, la idea era resaltar la preparación especial de los cafés de Segafredo Zanetti: "Esta marca, que vende en el mundo unos 80 millones de tazas al día -explicó Juan Felipe Salcedo, representante de Segafredo Zanneti en el país-, busca que en todas partes sepa igual.
Por eso, la receta de nuestro café está muy bien medida, grameada, con especificaciones exactas de temperaturas de las máquinas". En la carta, las entradas van desde 14.800 pesos hasta 32.000.
Además, hay oferta de paninis (entre 17.200 y 18.800 pesos) y pastas en preparaciones clásicas (de 14.200 a 28.800 pesos). Junto con el café, los postres y tortas cobran especial protagonismo. Y se puede probar el chocolate al estilo francés, variedades de té y la soda italiana Torani.
En otros momentos, Il Café Italiano será escenario de eventos privados de las marcas de autos y pronto tendrá un lugar para para la champaña Moet et Chandon.
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