Captiva Sport, calidad en el manejo.

La versión más equipada de la SUV mediana de GM ofrece comodidad como un sedán y buen desempeño en carretera.

El sueño de muchos es tener la suavidad de manejo para aguantar el tráfico citadino y también la potencia suficiente para un buen desplazamiento en carretera y poder rebasar con toda seguridad.

Estas características las tiene una de las SUV (Vehículo deportivo utilitario, por sus siglas en inglés) de General Motors, la Captiva Sport V6, vehículo que puede dar competencia a cualquiera de su clase con un manejo suave y seguro.

Por fuera es un auto que llama la atención, ya que su diseño se ve deportivo, elegante y con detalles externos como los espejos laterales que le dan un toque muy particular en el segmento de las SUV.

Un dato muy relevante es su gran rendimiento en combustible, lo que convierte a la Captiva en una buena opción, si se necesita hacer recorridos largos.

 

 A TOMAR PISTA:

 

Decidimos sacar esta belleza a carretera para conocer su desempeño. Ya la habíamos probado en la ciudad y realmente nos dejó con un buen sabor de boca, pero faltaba conocer qué tan eficiente es en las grandes distancias, donde se requiere además de otras cualidades, tanto en seguridad como en potencia.

El primer camino fue la autopista a Cuernavaca, ya que el inicio el camino es de subida. No nos dejó mal, pudimos rebasar con facilidad a otros vehículos de mayores dimensiones e incluso a algunos autos más deportivos. Respetando los límites de velocidad mantuvimos una aceleración constante, lo que dio confianza en el manejo de este modelo de GM.

Algo que es muy importante destacar es que la Captiva genera confianza en su desplazamiento y eso permite mantener una buena velocidad en todo el recorrido. En casos de frenado, se siente segura y también al tomar las curvas más pronunciadas. Además de que cuenta con la modalidad de manejo a manual para tener una mayor potencia en caso necesario. La altura que tiene es una buena ventaja al manejar en carretera, ya que ofrece una mayor visibilidad, sin perder la aceleración.

De regreso a la ciudad de México quisimos probarla en una carretera con un poco más de obstáculos, que fue el tramo libre Cuernavaca-México, donde se tiene una mayor cantidad de curvas, hay que frenar constantemente y se debe rebasar con mayor rapidez. En suma, el desempeño fue bueno para la Captiva, con la seguridad de un buen frenado y sobre todo estabilidad al momento de tomar las curvas.

Probablemente la Captiva tenga un detalle que va en contra y son las dimensiones interiores, ya que este tipo de vehículos son bien vistos para familias de cuatro o cinco miembros y se toma la decisión de compra por el espacio interior. Es aquí donde la Captiva puede no ser lo que una familia busque en un auto, ya que el espacio no es tan grande.

 Sin embargo, sus dimensiones favorecen meterle un poco de carga en caso de un viaje, ya que al abatir sus asientos ofrece buenas dimensiones para cargar algo más de equipaje, aunque sería un viaje para dos o tres personas.