domingo, 16 de septiembre de 2012

MG enciende motores en Colombia.

La icónica marca inglesa conocida como Morris Garages (MG) se estacionó en Bogotá para quedarse. La inversión supera los US$6 millones y ya está lista la estrategia de expansión para rodar por las principales ciudades del país.

 

 

Versátiles. Modernos. Elegantes. Innovadores. Deportivos. Prácticos. Pero quizá su gran diferenciador es que son reconocidos como íconos. Son Morris Garages, los emblemáticos MG, la detallada construcción automotriz de cortes redondeados de la industria inglesa, destacada por el buen gusto y el rendimiento forjados en el placer único que ofrece el confort al conducir.
Unos 85 años de historia que encierra el logo octogonal pulido en aquellas calles de Oxford, cuya casa, nacida como una pequeña fabricante de modelos deportivos, ahora rueda campante por las autopistas de las más imponentes ciudades del mundo entero. Pensadas obras de arte que ocho décadas después de su nacimiento llegan a Colombia y, estacionadas en una vitrina al norte de Bogotá, vienen a jugar de local en un negocio que este año pretende comercializar unas 320.000 unidades de carros nuevos.
“Siendo quienes somos, vamos a hacer las inversiones necesarias para crecer en el país. Estamos trayendo un inventario de más de 200 carros con todo el apoyo de la banca nacional”, advierte Nicolás Ocampo, gerente general de Los Autos, la distribuidora de vehículos que trajo al país la icónica marca. “Esta es una compañía recién constituida con el respaldo de un grupo de inversionistas pertenecientes a la Organización Ardila Lulle”.
El negocio se venía estructurando desde hace un par de años aseguran los inversionistas, midiendo siempre el riesgo y teniendo en cuenta que los colombianos ya estaban preparados para comprar marcas distintas a las tradicionales y a las ensambladas aquí. Por eso, la primera vitrina ya está abierta en Bogotá, pero “la expansión se dará por Bucaramanga, porque es una ciudad importante para nosotros. En el tema de vehículos es dinámica. Y seguirán Medellín, Barranquilla, Cali, sin dejar por fuera zonas como el Eje Cafetero, Tolima y Huila, que tienen mercados importantes”, apunta Ocampo.
Pero no todo lo inglés es tan oneroso como todos piensan, recalca: “Esta es una marca ícono que va a llegar con precios más cercanos al público y no en los niveles de las más costosas”. La respuesta de la gente podría ser rápida, si se tiene en cuenta que “traemos carros para todo tipo de público con diseños nuevos y gran equipamiento, aditamentos que en el sector automotriz se aprecian mucho. Vienen desde la hatchback MG3 para gente joven, hasta un sedán, que es grande para un ejecutivo o para quien guste de la potencia, pues trae un motor 2.5 V6 y es amplio, con connotaciones de comodidad”.
En ese portafolio aparece también el MG6, un carro deportivo en su línea familiar de cuatro puertas, “porque no queremos traer carros dos puertas”. Este combina la parte deportiva de MG con todas las necesidades de la familia colombiana en términos de espacio y comodidad. “Vamos a ofrecer toda la gama”.
Ocampo tiene el camino despejado y el tacómetro disponible para acelerar, pues, repite una y otra vez, como si estuviera revolucionando el motor del MG3 a punto de despegar en un óvalo de prueba, que no hay en el país vehículos como esta propuesta inglesa. “No hay competencia”, insiste. Tan sólo responde que encienden ventas en el segmento de gama media y media alta.
El precio le da la razón, por lo menos en lo que respecta al segmento. “Arrancamos desde los $42 millones y vamos hasta el sedán más grande de $85 millones. Pero todo depende del modelo y del equipamiento con el que se quiera comprar; por ejemplo, si la persona está buscando una caja automática o si, por el terreno colombiano, se queda con la mecánica”.
Elegantes, como buenos representantes de la industria inglesa, Morris Garages (MG), la nueva generación, mantiene su corte imponente y llega con unidades alargadas, carrocería compacta y extensa en sus laterales que optimizan el paso del viento. Alto en la parte trasera y bajo en la delantera, combina con una persiana que cumple con el objetivo de hacer de esta propuesta un vehículo robusto, deportivo, pero, ante todo, exclusivo con todos los dotes de clase. Así como los primeros que concibieron sus creadores en la pequeña ciudad de Oxford.

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