En su momento la coupé Fuego dio que hablar y despertó innumerables suspiros a su paso.
Décadas después Renault vuelve al ruedo con un superdeportivo, pero de alta gama: el Megane III RS, con un motor naftero 2.0 turbo, que ostenta una potencia de 250 CV.
El Rombo siempre ha sido un actor importante y reconocido en el mundo del deporte automovilístico con el R8 Gordini, el Supercinco GT Turbo, el Clio Williams, o, más recientemente, el Clio Renault Sport, todos autos deportivos emblemáticos de la marca.
El Nuevo Mégane III R.S. conserva los genes estilísticos del Mégane Coupé (que se vende en Mendoza desde hace tiempo). Dentro de muy poco ya podremos ver al primero de estos deportivos por las calles de nuestra provincia, de los que se esperan vender unos 200 a nivel país durante todo 2012.
Al tradicional modelo se le agrega un look deportivo inspirado en la F1. Algunos elementos de diseño destacan la silueta elegante y dinámica de la versión coupé: guardabarros ensanchados con llantas 18', paragolpes delantero con gran rejilla de entrada de aire y lámina aerodinámica de tipo F1, la salida central de escape, el difusor y alerón trasero, luces de día con LED integradas en el paragolpes delantero y más.
De esta forma exalta deportividad, robustez y estabilidad.
A bordo los detalles marcan la diferencia. El conductor adopta una posición de conducción deportiva, los asientos delanteros Recaro cuentan con sujeciones reforzadas a la altura del asiento y del respaldo. El volante ha sido ideado para ofrecer confort y deportividad, es de cuero y se ajusta en altura y en profundidad . Como en los vehículos de competición, este volante dispone de una referencia amarilla en el "punto 0". Esta marca es una imprescindible tras pasar por una serie de curvas cerradas o circular en una superficie con poca adherencia.
Los pedales y el reposapiés de aluminio completan el ambiente deportivo del puesto de conducción.
Mientras que el equipamientos tecnológico también es de alto nivel: la climatización automática bi-zona con 3 modos para subir la temperatura (Soft-Auto-Fast), tarjeta manos libres con cierre al alejarse del vehículo, contadores analógicos onda competición, indicador luminoso-sonoro. Mientras que el R.S. Dynamic Management (ESP tri-modo), es una herramienta que permite al conductor elegir el nivel de asistencia electrónico para la conducción.
Una de las mayores virtudes es su motor de 2.0, 16v turbocomprimido de nueva generación.
Desarrolla una potencia de 250 CV a 5.500 r.p.m., un par de 340 Nm a 3.000 r.p.m.
Los expertos de Renault cuentan que esta potencia y el par se deben sobre todo a: la evolución del turbo, que proporciona una relación potencia/disponibilidad óptima. "Con el 80% del par máximo disponible desde 1.900 r.p.m., este motor ofrece un empuje continuo y limpio gracias al turbo de tipo twin scroll y al decalador del árbol de levas de admisión".
¿Transmisión? Viene con la caja de velocidades manual de 6 relaciones. Permite explotar al máximo la potencia del motor: se alcanza el 0 a 100 km/h en 6"1 y el 0 a 1.000 m se recorre en 25"7.
Además, aseguran que ofrece el mejor consumo de su categoría en este nivel de potencia con 8,4 l/100 km en ciclo mixto, lo que equivale a unas emisiones de CO2 limitadas a 195 g/km.
A esta altura ya se estarán preguntando por el precio. El informado de fábrica es U$SD 49.000.
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