SHANGHAI.- El automóvil de lujo vive su edad de oro en China, el mercado que más crece en el mundo, según los grandes fabricantes que estuvieron presentes en el Autoshow de Shanghai, que tienen más pedidos que capacidad para fabricar vehículos.
El director ejecutivo de Rolls-Royce, Torsten Muller-Otvos, no se ha olvidado del chino que el año pasado, en el salón de Pekín, se abrió paso entre la muchedumbre hasta su stand con una gran maleta.
La abrió y Muller-Otvos vio "millones de yuanes". "¡Era alucinante, se compró un Phantom!".
Nadie fue al Autoshow de Shanghai con maletas llenas de dinero, asegura el dirigente de Rolls Royce, pero los negocios van viento en popa ahora que el mercado chino es el que más crece para los vehículos de lujo.
El pasillo que conduce al stand ha sido literalmente invadido por el gentío desde que Muller-Otvos terminó de desvelar el nuevo Ghost, primera vez que Rolls-Royce lanza un nuevo modelo en Asia.
Utilizando sus contactos para acceder al salón que sólo estaba en abierto a la prensa en ese momento, millonarios compraron dos Rolls-Royce Phantom --precio de catálogo 9 millones de yuanes, unos 990.mil euros ($1,4 millones) -- y cuatro Ghost versión alargada --5,1 millones de yuanes, unos 560 mil euros--, pese a unos impuestos del 145% para los vehículos importados.
"Normalmente esto no ocurre. No en todo caso, el día reservado a la prensa" reconoce Muller-Otvos.
Las ventas de Rolls-Royce crecieron el 600% en China el año pasado y Muller-Otvos espera un crecimiento de dos cifras este año.
China arrebató el pasado año a Gran Bretaña la segunda plaza de la clasificación de ventas de Rolls-Royce, por detrás de Estados Unidos.
Las ventas totales de vehículos de lujo en China alcanzarán este año las 909.900 unidades, frente a las 727.200 del pasado año, según previsiones de IHS Automotive, que vaticina que para 2015 alcanzarán los 1,6 millones de vehículos.
Este crecimiento refleja la explosión de la riqueza en la segunda economía mundial que cuenta con 115 multimillonarios en dólares, según la revista Forbes.
"Hay más ciudades con millonarios en China ahora que en Europa", dijo Matthew Bennett, director para Asia-Pacífico del fabricante de vehículos de lujo británico Aston Martin.
Aston Martin causó sensación en el Autoshow de Shanghai al vender uno de sus modelos superlujo One-77 por 47 millones de yuanes (5,15 millones de euros). El fabricante ha decidido fabricar sólo 77 unidades de este modelo, y reservar cinco para los compradores chinos.
Los precios del One-77 comienzan a 38 millones de yuanes (4,20 millones de euros), tasas incluidas, y suben con opciones de decoración interior en oro, explica Bennett, para quien "se trata probablemente del modelo más caro del evento" de Shanghai.
Asia es el mercado de mayor crecimiento para Aston Martin, y China ha superado a Japón para convertirse en la región en el primer mercado del británico, con más de 100 vehículos vendidos, una cifra que Bennet espera doblar este año.
"Estamos encantados con el potencial de China", dice.
El italiano Lamborghini también cree que este país se va a convertir en su primer mercado este año.
La fabricación no da abasto con los pedidos de China. Los clientes del Autoshow de Shanghai han oído que tendrán que esperar a 2012 para la entrega, señala el diario China Business News.
Para los fabricantes de los coches de lujo, la edad de oro ha comenzado.
"Todavía hay mucho potencial de crecimiento", dice Muller-Otvos, "muchos de los nuevos millonarios llegan al mercado".
El director ejecutivo de Rolls-Royce, Torsten Muller-Otvos, no se ha olvidado del chino que el año pasado, en el salón de Pekín, se abrió paso entre la muchedumbre hasta su stand con una gran maleta.
La abrió y Muller-Otvos vio "millones de yuanes". "¡Era alucinante, se compró un Phantom!".
Nadie fue al Autoshow de Shanghai con maletas llenas de dinero, asegura el dirigente de Rolls Royce, pero los negocios van viento en popa ahora que el mercado chino es el que más crece para los vehículos de lujo.
El pasillo que conduce al stand ha sido literalmente invadido por el gentío desde que Muller-Otvos terminó de desvelar el nuevo Ghost, primera vez que Rolls-Royce lanza un nuevo modelo en Asia.
Utilizando sus contactos para acceder al salón que sólo estaba en abierto a la prensa en ese momento, millonarios compraron dos Rolls-Royce Phantom --precio de catálogo 9 millones de yuanes, unos 990.mil euros ($1,4 millones) -- y cuatro Ghost versión alargada --5,1 millones de yuanes, unos 560 mil euros--, pese a unos impuestos del 145% para los vehículos importados.
"Normalmente esto no ocurre. No en todo caso, el día reservado a la prensa" reconoce Muller-Otvos.
Las ventas de Rolls-Royce crecieron el 600% en China el año pasado y Muller-Otvos espera un crecimiento de dos cifras este año.
China arrebató el pasado año a Gran Bretaña la segunda plaza de la clasificación de ventas de Rolls-Royce, por detrás de Estados Unidos.
Las ventas totales de vehículos de lujo en China alcanzarán este año las 909.900 unidades, frente a las 727.200 del pasado año, según previsiones de IHS Automotive, que vaticina que para 2015 alcanzarán los 1,6 millones de vehículos.
Este crecimiento refleja la explosión de la riqueza en la segunda economía mundial que cuenta con 115 multimillonarios en dólares, según la revista Forbes.
"Hay más ciudades con millonarios en China ahora que en Europa", dijo Matthew Bennett, director para Asia-Pacífico del fabricante de vehículos de lujo británico Aston Martin.
Aston Martin causó sensación en el Autoshow de Shanghai al vender uno de sus modelos superlujo One-77 por 47 millones de yuanes (5,15 millones de euros). El fabricante ha decidido fabricar sólo 77 unidades de este modelo, y reservar cinco para los compradores chinos.
Los precios del One-77 comienzan a 38 millones de yuanes (4,20 millones de euros), tasas incluidas, y suben con opciones de decoración interior en oro, explica Bennett, para quien "se trata probablemente del modelo más caro del evento" de Shanghai.
Asia es el mercado de mayor crecimiento para Aston Martin, y China ha superado a Japón para convertirse en la región en el primer mercado del británico, con más de 100 vehículos vendidos, una cifra que Bennet espera doblar este año.
"Estamos encantados con el potencial de China", dice.
El italiano Lamborghini también cree que este país se va a convertir en su primer mercado este año.
La fabricación no da abasto con los pedidos de China. Los clientes del Autoshow de Shanghai han oído que tendrán que esperar a 2012 para la entrega, señala el diario China Business News.
Para los fabricantes de los coches de lujo, la edad de oro ha comenzado.
"Todavía hay mucho potencial de crecimiento", dice Muller-Otvos, "muchos de los nuevos millonarios llegan al mercado".
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