Aston Martin tuvo una presentación deslumbrante durante la apertura del Salón del Automóvil de Frankfurt 2011, transformándose en uno de las marcas protagonistas de la jornada, gracias a la presentación del DBS Carbon Edition, un modelo muy especial disponible en versiones coupé y descapotable.
Con este lanzamiento, la marca inglesa ofrece a sus clientes una gama líder en su clase, todos con diferentes características, pero con la misma única alma de lujo que caracteriza a Aston Martin.
Esta elegante y dinámica versión se denomina así, debido a que la fibra de carbono viste gran parte de su fisonomía, como la parrilla delantera, los espejos retrovisores, el tablero o el panel de instrumentos.
De igual manera, las levas del volante asociadas al cambio semiautomático Touchtronic II son de magnesio, recubiertas por el preciado carbono. El conjunto se complementa con las ya conocidas llantas de aleación de diez radios que pueden escogerse en dos acabados: brillo y mate.
Otra de las características de esta exclusiva versión del DBS radica en sus tonalidades. Para crearlo, los diseñadores de la firma británica se basaron en el Aston Martin DBS Carbon Black, lanzado en 2009. Pero ahora con la llegada del Carbon Edition, se suman el naranja fuego y el gris cerámico.
La tintura de la carrocería se ha realizado de forma artesanal, con siete capas de pintura en el que se han invertido 25 horas de pulido, a fin de conseguir esa textura acristalada. Lo mismo ocurre con la exclusiva tapicería de piel, que se suma al negro y naranja existentes, y que ha sido tejida a mano, invirtiendo en cada modelo más de 72 horas.
En lo que a mecánica se refiere, se mantiene el propulsor 6.0 V12 de 517 CV, que le permiten disfrutar de unas soberbias prestaciones: acelerar de cero a cien en 4,3 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 295 km/h.
Las primeras unidades del DBS Carbon Edition podrán reservarse a partir de diciembre de 2011.
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