El modelo coupé con el motor de 150 caballos de fuerza y la caja manual de 5 velocidades fue un serio contendiente para los autos deportivos importados, a pesar de ser de tracción delantera.
Las marcas estadounidenses siempre tuvieron problemas para crear sedanes compactos que interesaran al público, sobre todo debido a que los fabricantes japoneses tenían el control del mercado con productos de gran calidad y diseños vanguardistas, todo esto cambió cuando Dodge lanzó al mercado el Neon en 1995.
Lo que hizo exitoso al Neon es que fue creado como un auto divertido de manejar. La suspensión y la dirección se pusieron a punto para entregar el mejor comportamiento posible en curvas y tenía dos motores a escoger, uno de los cuales tenía 150 caballos de fuerza, una cifra bastante alta para un auto económico familiar en esa época. Si a esto le agregamos un diseño diferente y que costaba menos que la mayoría de la competencia, el Neon tenía todo para apoderarse del segmento.
Por razones obvias el auto se hizo muy popular rápidamente entre compradores que buscaban un auto barato pero eficiente, así como con compradores jóvenes que buscaban una alternativa doméstica a los autos importados deportivos.
La primera generación del Neon se vendió de 1995 a 1999 con carrocería sedán y coupé. La primera generación era más pequeña y con un diseño más llamativo que la segunda, también ofrecía una mejor combinación de equipamiento y desempeño para su época.
El refinamiento nunca fue su fuerte y los Neones con el motor base de 132 caballos de fuerza y caja automática de tres velocidades eran ruidosos y lentos. Sin embargo, cuando se equipaba con el motor de doble árbol de levas, la caja manual de 5 velocidades y los paquetes Sport o R/T, el Neon podía ser un auto sumamente divertido de manejar.
Lamentablemente Dodge decidió tomar otro camino cuando rediseño el auto para el modelo 2000. Crearon un auto un poco más refinado pero era más pesado, más caro y no era más potente. La llegada de la versión SRT-4 turbo en 2003 regresó a algunos compradores que había perdido, pero para entonces los compradores que buscaban el auto por su contenido precio ya se habían ido en busca de otro auto que les ofreciera lo que el Neon ya no hacía.
La segunda generación se comercializó de 2000 a 2005 y ofrecía mayor espacio interior, manejo más suave, mejor dirección y buenos frenos. Lamentablemente los motores que se ofrecían no eran lo suficientemente potentes para el peso del auto, había demasiado ruido dentro de la cabina y le faltaba equipamiento frente a la competencia.
Inicialmente sólo se podía adquirir con el motor de 132 caballos de fuerza con caja manual de 5 o automática de tres velocidades. Las versiones R/T y ACR llegaron en 2001 con un motor de 150 caballos de fuerza y sólo se podían equipar con la caja manual.
Una caja automática de 4 velocidades reemplazo a la vieja de 3 marchas a partir de 2002.
El Neon SRT-4 es uno de los puntos más brillantes en la historia del Neon. Vendido de 2003 a 2005, este auto era lo más rápido que se podía comprar por $20 mil. Utilizaba un motor de 2.4 litros turbo con 215-230 caballos de fuerza (la potencia aumentaba ligeramente cada año) y una suspensión completamente rediseñada con la pista de carreras en mente.
Este Neon no solo te llevaba de 0 a 60 millas por hora en menos de 6 segundos, también era sumamente fácil llevarlo al límite en las curvas, particularmente los modelos 2004 y 2005 que utilizaban un diferencial de derrape limitado.
El valor de reventa del Neon siempre ha sido bajo, por lo que comprar uno será bastante barato. Lo malo es que la confiabilidad de este auto también es algo baja, por lo que es seguro que habrá que invertir algo de dinero en mantenerlo.
Se recomienda un chequeo exhaustivo por un mecánico antes de hacer una compra y es importante alejarse de cualquier unidad que haya presentado cualquier tipo de problemas tanto en motor como en la caja de velocidades.
El Neon fue descontinuado después del modelo 2005, su sucesor fue el hatchback de 4 puertas, Caliber.
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